FAF La hija a la que le molesta todo de su hermano.

Titular: la hija a la que le molesta todo de su hermano.

Tengo dos hijos que se llevan 22 meses, la mayor está en una racha en la que no aguanta nada de lo que hace su hermano, cantar, mirar algo que ella está dibujando, coger un juguete suyo….

Le habla mal y a veces le insulta, yo en ese momento me siento enfadada, triste y preocupada por los que le está pasando al pequeño. Pero cuando intervengo y mi hija sigue haciéndolo me siento retada.

Le advierto a ella que no le gustaría que se lo hicieran y que le hablaran de esa manera.Que fuera responsable de sus actos, porque tendrían consecuancias (cuando ella quisiera su hermano no le dejará su juguete, cuando tenga frío no le dejará la chaqueta, cuando esté cantando le molestará y no la dejará cantar…)

También le dije que en casa las cosas son de todos pero que si ella no quiere compartir más que nadie le obliga y que se atenga a las conseuancias de sus actos cuando ella necesite algo que otro no utilice en ese momento (cuento, lápices)

La niña intenta seguir hablando mal e incluso tirando cosas (siempre de su hermano) o amenazando con que las va a romper. Yo sigo diciéndole, cada vez más enfadada y al final cede recogiendo lo que ha tirado o callando. Pero yo me siento como que ya es tarde, que todos estamos enfadados y el hermano llorando dolido. A mi me frustra que después de unas horas la situación se vuelve a repetir.

Pienso que si la hablo y en un rato vuelve a haber otra situación similar no me ha valido de nada, y si grito y me enfado mucho también vuelve a ocurrir lo mismo y encima yo me arrepiento y me siento culpable por haber gritado.

Ayer fue una tarde dura, con varias ocasiones de estas y por la noche cuando el niño se durmió la niña y yo nos pusimos a cocinar juntas, para que se sintiera reconocida, integrada y en conexión con la familia. Parece que se acostó tranquila, pues un rato antes había sucedido un episodio de hablar mal a su hermano.

Creo que la emoción de la niña es de estar molesta con todo lo que hace su hermano al rededor suyo pero ya tienen 9 y 7 años. Ella tiene que entender que tiene un hermano y que no puedo estar todo el rato con ella sola.

No se cómo actuar, sobre todo cuando le habla tan mal a su hermano y se pone de esa manera porque no quiero que piense que me pongo del lado del pequeño todo el rato al defenderle y siempre en contra de ella.

Estoy hablando de una niña super dulce que de repente está teniendo unas reacciones y unos tonos al hablar que no son propios de ella.

¿Qué emociones generó? Me siento triste, preocupada por el hermano, molesta por las maneras en las que le habla.

¿Qué hiciste para solucionarlo? Le digo que no le gustaría que se lo hicieran a ella, que tome consecuencias de cuando ella necesite algo o quiera hacer algo y él le pague con la misma moneda, que las cosas son de todos y que si ella no lo está utilizando lo normal es que la otra persona la coja. que siempre hay que ceder a lo que ella dice, para que no esté enfadada.

¿Entonces qué hizo la peque? Intenta seguir hablando mal e incluso tirando cosas (siempre de su hermano) o amenazando con que las va a romper. Yo sigo diciéndole, cada vez más enfadada y al final cede recogiendo lo que ha tirado o callando.

¿Y entonces qué ocurrió? ¿qué hiciste? Le dije que eso no, que era un límite de casa, no se pega, no se insulta y menos amenazar con romper el juguete de otro.
Creo que funcionó en el momento porque paró, cedió. Pero también creo que no funcionó porque si en un rato lo vuelve a hacer no sirvió de nada. Además si ya el hermano está llorando super triste, tampoco ha funcionado.
Me sentí:
Desesperado, perdido, inútil, deficiente.

¿Cómo crees que estás influyendo? No se cómo actuar, sobre todo cuando le habla tan mal a su hermano y se pone de esa manera porque no quiero que piense que me pongo del lado del pequeño todo el rato al defenderle y siempre en contra de ella. No soporto que el pequeño tenga que aguantar enfados y esperar a que nos tranquilicemos pacientemente durante un buen rato.

Cuando está el otro progenitor, en vez de callar y ayudar a que todo fluya, se enfada también y al final le tengo yo que estar tranquilizando y calmando, diciendo que la que estoy en el embrollo soy yo y no él y que se tranquilice. A veces salimos discutiendo nosotros.