¡Hola Bei!
No sé si este es el canal correcto para mí pregunta, pero te escribo por aquí por si alguien más le sirve.
Hoy al leer el tema 14 sobre el trabajo personal del adulto preparado hablas de que nuestro papel «no consiste en enseñar directamente a los niños sino en guiarlos, en dirigir su energía, continua y espontánea, hacia actividades creadoras. Es exactamente la misma función que deberíamos tener los padres: dar raíces y alas.»
Mi bebé cumple 11 meses mañana y de momento no se concentra en nada más allá de 2 minutos. Es un espíritu libre, muy disperso, que hace básicamente lo que quiere dentro de los límites que le marcamos. Su juego es totalmente desestructurado y se dedica a explorar todo lo que puede. De momento vamos respondiendo a lo que observamos que le interesa, el plumero, recogedor y cepillo, jugar con agua en el fregadero… Pero con los juguetes no juega, sólo los saca de la estantería, los observa y los abandona. ¿A partir de qué momento tiene sentido intentar dirigir su energía hacia alguna actividad en concreto?
¡Muchas gracias!