solaris

Respuestas de foro creadas

Mostrando 1 respuesta al debate
  • Autor
    Entradas
    • #55246
      solaris
      Miembro

      Hola a todas:)

      Me perdí el primer webinar porque no había modo de que se durmieran los peques…Igual que Ana, que acaba de preguntar qué libros de disciplina positiva recomendarías, Bei, estoy también interesada. Espero poder sumarme al siguiente webinar pero lo tengo complicado porque estaré sola con los dos durante casi dos meses.

      Accediendo al vídeo grabado del primer webinar, me he dado cuenta de que me pasé por alto este hilo.

      Aquí mis respuestas:

      1.Por el momento, sólo tengo conflictos con el mayor de mis hijos, de 4 años. 

      Mis mayores retos son algunos de los momentos de transición del día:
      
- vestirse por las mañanas y ponerse los zapatos para salir al cole
      _ baño y acostarse
      Últimamnte se enfada también por ciertos menús, cuando antes le encantaba todo.

      2. Con algunas cuestiones soy muy firme, como ponerse el casco cuando hay que salir con el patín por zonas que creo peligrosas o lavarse las manos antes de comer.

      Intento ser amable de primeras con este tipo de casos, y con todo lo demás. Hay veces que por cansancio termino perdiendo los papeles.



      3.
      Resultados positivos de ser única y exclusivamente amable.
      Sobre todo se evitaría casi todos los conflictos y escucharlos en todo momento.

      Resultados negativos de ser única y exclusivamente amable.
      Hay veces que pasaría de hacer sus tareas o responsabilidades, y terminaríamos por asumir eso nosotros. También pérdida de mi papel como figura de referencia.

      Resultados positivos de ser única y exclusivamente firme.
      Hay cuestiones que terminaría por automatizar

      Resultados negativos de ser única y exclusivamente firme.
      No sé si mi hijo terminaría por desarrollar resentimiento y enfado, falta de sentirse valioso, falta de confianza y ganas por ser más creativo. Se me terminaría por olvidar escuchar su opinión.

      4. Intento decir las menos veces posibles que no durante el día, para que cuando sea estrictamente necesario no esté ya saturado de tanta negativa. 
Cuando es un “no” porque me conviene personalmente a mí, o es estropear o molestar a otros, negociamos y doy alternativas; por ejemplo: jugar con una pelota dura dentro de casa, que puede romper lo que sea, pues hacer lo mismo pero en el patio; querer quedarse en el parque más, pues negociar un poquito más de tiempo o ir al día siguiente antes.
      Intento dar explicaciones cortas y firmes al porqué no. Tengo recuerdos de mi infancia de “no porque lo digo yo” que me generaban una sensación de total injusticia y quiero evitar eso.

      Leyendo estos días, no sé si el blog o lecciones anteriores de otros cursos, sobre la mesa de la paz, estamos poniéndolo en práctica y construyendo juntos este espacio en casa. Aún no ha sido necesario usarlo, pero está muy contento con este rinconcito especial.

    • #54914
      solaris
      Miembro

      Hola, soy Jara, madre de dos, uno de 1 año y otro de 4.
      Desde la llegada del segundo hijo se nos está complicando el acabar los días de manera tranquila. Cuando éramos sólo 3 todo nos resultado súper fácil y apenas había conflictos en casa, ahora es casi a diario.
      Me gusta leer sobre temas de crianza, Montessori y discplina positiva, así que no parto de cero, pero me faltan herramientas o interiorizar bien las que ya tengo para que en momentos difíciles no explote yo.
      Me he dicho mil veces que no quiero gritar, que quiero educar de otro modo, pero no lo logro siempre.
      Desde hace unos meses veo que nos estamos desajustando demasiado y me da miedo que vaya a peor.
      El padre está bastante alejado de pensar así y lo minimiza, tampoco por el momento comparte que funcionen estos métodos de educación. Tiene una visión mucho más tradicional, pues fue educado con sus abuelos, y creo que en ese sentido, es como si fuera la generación de mis padres… Espero poco a poco contagiarlo.

Mostrando 1 respuesta al debate